Pedacito de cielo.
Que suerte la mía de tenerte.
Porque te convertiste en mi camino y mi refugio. Porque sos la persona que alumbra mi vida y alegra mi corazón. Porque cuando vos estás, yo estoy. Y aunque no me lo pidás, ahí voy a seguir. Porque quiero acompañarte en cada paso que des.
No importa cuánto tiempo pase y no importa lo que suceda en el intermedio, quiero siempre ser el camino a donde podás volver.
Con vos me di cuenta, que la vida pasa de largo y no espera a nadie. En un abrir y cerrar de ojos cambiamos de papel, y entonces era yo quien aprendía de vos.
Me enseñaste que un corazón puro y honesto si existe, que tus abrazos son la descripción perfecta de abrazar el cielo, y que una mirada como la tuya puede hacer milagros en el alma de quien la recibe.
Deseo que siempre te sintás con el poder de caminar hacia donde tu corazón te lleve, con entera libertad. Y perseguir sólo aquello que le dé vida a tu alma.
Que nunca se apague ese fuego que llevás dentro, ese talento nato, esa inteligencia envidiable, y esa capacidad de dar amor y brindar ayuda a quien lo necesita.
Porque iluminás con tan solo tu presencia.
Porque sos y siempre vas a ser mi pedacito de cielo en la tierra.
Para vos mi enano, baks.