Pequeñas cosas.

 

Un amanecer sin prisa. Llorar de la risa.
Un te quiero inesperado. Ese abrazo tan ansiado.

Las buenas noticias. Sutiles caricias.
Un beso en la frente. Ojos sonrientes.

Las fotos antiguas. Las charlas continuas.
Un trago con viejos amigos. El reencuentro de varios caminos.

El olor a lluvia. Una buena cumbia.
Las eternas sobremesas. Las sorpresas.

Una videollamada sin planear. Aprender a amar.
Ver sonreír a los tuyos. Vivir sin orgullo.

Un brindis sin motivo. Un buen libro.
Experiencias vividas. Metas cumplidas.

Las tardes silenciosas. Apreciar las pequeñas cosas.
Un vinito en el bar. Y un café para llevar.

 
Stephany Knize